¿Cómo es un juicio laboral? Nuestro abogado nos ha informado que ya hemos presentado la demanda en el Juzgado de lo Social, y que quedamos a la espera de que nos llame para la fecha del juicio (nos ha dicho exactamente «fecha del señalamiento»).
A continuación y para los que nunca se han visto en la situación de ir a juicio, tras darle vueltas al asunto generalmente les surge una duda ¿cómo será el juicio? Desde ya, te anticipamos que no tiene nada que ver con las películas y series americanas, y también, desde este momento, te adelanto que el juez no tiene martillo para dar por finalizado el juicio.
Bromas aparte, desde nuestra experiencia como especialistas de asuntos laborales hemos podido comprobar que explicar a nuestros clientes el desarrollo del juicio, les ayuda a sobrellevar el momento, que si bien para nosotros los profesionales, es nuestro día a día, no debemos olvidar nunca que para los clientes en la mayoría de los casos es una nueva experiencia a prueba de nervios.
¿Cómo es un juicio laboral?
Antes del juicio
Generalmente es conveniente mantener una reunión con tu abogado al menos con unos días de antelación para que te explique, lo que estás leyendo en estas líneas sobre el desarrollo del juicio. Esta información, reduce la incertidumbre y hará que ese momento de tensión sea más llevadero y que sepas cómo funciona, lo que te dará cierta tranquilidad para afrontarlo. En esa reunión, se aprovecha para repasar los documentos, argumentos y testigos que podremos presentar en el acto del juicio. En resumen, ultimar detalle e informarte de cómo es un juicio y fijar hora y lugar para reuniros el día del juicio.
El día del juicio
Es recomendable quedarás con tu abogado con antelación a la hora fijada para el juicio, además de aseguraros de que no llegaréis tarde, os permitirá repasar hechos y aspectos que se vayan a abordar en el juicio. No olvides tu DNI o NIE es imprescindible.
Conciliación judicial
Antes de celebrar el acto del juicio (o vista oral) ante el Juez, se realiza un acto de conciliación judicial ante el Secretario Judicial, consiste que ambas partes con sus abogados se presentan ante el Secretario Judicial y éste intenta que haya acuerdo que evite el juicio acercando posturas. Si hay acuerdo se redacta un acta de conciliación con lo que se haya acordado, en caso contrario se pasa al acto del juicio propiamente.
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Comienza el juicio
No ha habido acuerdo, así que toca celebrar el juicio, nos dirigimos a la sala de vistas donde se celebrará. Allí encontramos una sala en la que enfrente se encontrará el juez y a ambos lados del estrado un abogado a cada lado, uno será el nuestro y el otro el de la parte contraria. Si quieres ir acompañado de alguien puedes hacerlo, a los juicios puede entrar quien quiera, es lo que se llama «audiencia pública», excepto los testigos que deben permanecer fuera de la sala hasta que llega el momento para declarar como más adelante explicaremos.
El acto del juicio o vista oral tiene tres fases ALEGACIONES – PRUEBA y CONCLUSIONES, en cada una de las tres intervienen generalmente una vez cada una de las partes y el juez es el que impulsa el desarrollo del acto e interviene cuando lo considera necesario.
ALEGACIONES:
Es la primera parte del juicio, la parte demandante se ratifica en su demanda (es decir mantiene su petición) y añade algún dato o aclaración que considere necesaria respecto a los hechos que ha alegado en la demanda presentada en su día.
La parte contraria (el demandado) en esta fase, generalmente, lo que hace es oponerse a la demanda y expone sus argumentos sobre los hechos. Tras las alegaciones de las partes, se pasa a la fase de prueba
PRUEBA:
En esta segunda fase es donde las partes aportan sus pruebas sobre los hechos, las más usuales suelen ser documentos, declaraciones de testigos que han presenciado los hechos y las declaraciones de las partes (demandante y demandado), así como pruebas periciales en algunos procedimientos. Tras valorarse los documentos e interrogar a los testigos, se pasa a la tercera y última fase, la de conclusiones.
CONCLUSIONES:
El juicio toca a su fin, en esta fase, cada parte, a la vista de la prueba practicada, hace una valoración de la misma para mantener su petición en el caso del demandante o solicitando que se desestime la demanda en el caso del demandado.
Tras las conclusiones, el Juez pronuncia el famoso «queda visto para sentencia» y fin del juicio, recuerda: sin martillo !!!
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